martes, 25 de abril de 2017

Liga 2016/17, Jornada 22: A la espera del Everest

Podríamos resumir el partido del sábado diciendo que no hubo partido. Pero tranquilos, no seré tan escueto y contaremos cómo se desarrolló para aquellos que no lo vieron, o para aquellos que simplemente quieran revivirlo. Esgrimía eso de que no hubo partido, porque el dominio azul fue total y absoluto, o si lo miramos desde la perspectiva de mi amigo Juanma, "jugamos nosotros contra nosotros mismos". Tres puntos más que caen al zurrón, y lo que dice el titular de esta crónica.


Otra vez acudíamos al Facundo Rivas ejerciendo de locales. Quince futbolistas iban a ser de la partida porque Alberto finalmente no pudo vestirse de corto. Había que sumar sí o sí tras la victoria del Rayo 13:


Dominio y toque. Esas son las palabras anotadas en mi libreta y que reflejan lo que pasaba sobre el césped. El primero no tardaría en caer; de un saque de banda, iba a surgir la conexión Javi-Sergio Pérez (no iba a ser la última) en la que nuestro pundonoroso delantero, anotaría con su zurda en el primer palo. Camino allanado.


Tocando de un costado a otro, sin prisa alguna, se intentaba elaborar el juego de ataque. La casi inexistente presión del rival facilitaba mucho las cosas, pero en el último tramo no se acababa de encontrar el camino del gol. Las llegadas se multiplicaban, pero con el paso de los minutos, la ansiedad también. Oportunidades claras, siendo honestos, no se producían, y ellos poco a poco empezaron a estirarse, pero sólo un par de centros laterales, perfectamente atajados por Manu, eran todo su bagaje ofensivo.


A poco de llegar la media hora, una rápida salida propiciaría por la diestra la asociación que ya había construido el primer tanto. Javi se internaba en la media luna del área y tocaba el balón para que otra vez Sergio lo alojase en la red. Tere se encargaba desde la parte superior de la grada de recordarme que había sido otra vez el ´5´ el asistente, y está claro que tan importante es quien consigue marcar, como el que se lo facilita. Con 2-0 la tranquilidad era ya total, porque además los de naranja eran muy nobles, hasta demasiado me atrevería a decir.


El descanso trajo el ya de por sí habitual baile en la portería. Poco a poco iba a haber minutos para todos. No variaba en absoluto el panorama, es más, los tímidos acercamientos por su parte desaparecieron por completo y a Diego sólo le faltó sacar la silla de tijera para ver el resto de goles plácidamente. En el tercero iba a destacar Isma, que apenas llevaba un minuto sobre el campo; el ´9´ la dejó correr engañando a su par y puso un pase que cazaría Kike tras un rechace desesperado de un zaguero. No faltaba a su cita el pichihi.


Continuaba el monólogo azul. En un saque de esquina en corto, Gabriel la colgaba al corazón del área para que Ismael la pusiera de forma sutil con la cabeza lejos del alcance de su portero, que dicho sea de paso, sin hacer grandes paradas, fue de lo mejor de los fuenlabreños y evitó que la goleada fuese mucho más amplia.


Sin más misterio en conocer dónde pararía la cuenta, el choque agonizaba. De entre lo más destacado, ver de nuevo a Sergio Robles aparecer por el verde, ahora ya sólo hace falta que recupere ese nível que de sobra tiene en sus botas. Cuando apenas quedaban un par de minutos para alcanzar los setenta reglamentarios, una internada por la derecha de Marcos, que hábilmente dejó pasar José, fue la guinda para que el otro Sergio firmase un más que merecido hat-trick, del cual nada más que le faltó llevarse la pelota firmada, como pocos días antes hicieron el resto de sus compañeros con Aitor, que tampoco falló para animar desde la valla a sus amigos.


Ahora llega lo verdaderamente difícil, el desafío es complicado. Seguro que cuando se pretendió hollar la cima más alta del mundo, la mayoría pensó en que quien iba a intentarlo, estaba condenado a no lograrlo. Pero como en aquel, y en muchos otros retos, detrás había alguien que en su interior latía un 'nada es imposible'. Aquí no hay sólo uno, sino todo un equipo, que el próximo sábado va a dejarse el alma por alcanzar su particular Everest. Algo me dice que vamos a lograrlo, todos confiamos en vosotros, y si no puede ser, sabed que habéis hecho una temporada de sobresaliente. ¡Vamos que podemos!.


1 comentario:

  1. Jesús, yo que no pude estar, acabo de vivir el partido como si estuviese en la grada. Que bien lo haces coño!. Hat-trick muy merecido para Sergio, que siempre destaca en sus intervenciones.

    Cierto que ahora queda lo mejor... Pase lo que pase nuestros artistas son los verdaderos campeones de la liga. Sé que lo harán fenomenal en estos próximos partidos. Saldrán enchufadísimos!

    Y como el lema que ondea en el mejor estadio del mundo... "NUNCA DEJES DE CREER"... Pues eso... a creer en nuestros campeones!

    Fenomenales fotos Gema!

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