Liga 2014/15, jornada 17: Una victoria por inercia

Rayo 13- 0 ; Móstoles URJC 'I' - 3

1-Mar-2015 / 15.30h El Naranjo (Fuenlabrada)

Goles: 0-1 Sergio (4´); 0-2 David II (64´); 0-3 David II (66´)

Uno menos. Ya "sólo" quedan nueve para alcanzar un objetivo que al principio parecía una quimera. Cierto es que quedan los partidos más difíciles, pero también es que si hay alguien que puede permitirse un tropezón, esos son Los Artistas, el resto no. Con los pies en la tierra, somos realistas...todo puede pasar. Pero también ambiciosos ¿por qué no van a ser nuestros chicos campeones? En la buena senda están, y si se supera la prueba de fuego del próximo fin de semana, un buen trozo del sueño estará ganado. De momento, tres puntos más para la buchaca. No fue un partido brillante, pero sí solventado con nítida superioridad. 

Justo hace cuatro meses, nos enfrentamos en la ida a éste equipo. Ya en el calentamiento se observaba que tenían novedades respecto a aquel encuentro. Nosotros acudíamos con todos a El Naranjo, recordando cuando jugaban aquí como chupetines.

En apenas un minuto se vio claramente quienes iban a ser dominadores: los nuestros. La primera internada de David Catalín por la zurda se saldó con un claro penalty por agarrón. Sergio, decidido, cogió la pelota y la depositó en el punto de los once metros. Con confianza lanzó y su portero nada pudo hacer por detener la pelota pese a adivinar el lado. 0-1. Daba la sensación de que viviríamos un encuentro tranquilo...de haber concretado alguna de las muy claras que tuvimos

El triunfo en realidad nunca se vio comprometido. Pablo al principio y Diego al final nunca pasaron verdaderos apuros, pero la falta de definición generaba una razonable incertidumbre con resultado tan corto. Fue una lástima que primero Javi no llevase a la red una gran jugada de David otra vez por la izquierda. O que minutos después, en una jugada con el mismo protagonista, nadie aprovechase su pase de la muerte. El caso es que un tanto de renta era escaso premio para lo que se veía sobre el campo. Merecíamos más pero no remachábamos.

Entre la falta de tino cara a portería, y la horrible actuación del árbitro, que debió tragarse el silbato para no señalar tanto fuera de juego inexistente, seguía existiendo la posibilidad de llevarnos un susto en una acción aislada. En cualquier caso no fue una mala primera mitad, en la que se utilizaron ambas bandas para atacar y en defensa no se pasó apuro alguno. Con el minuto treinta llamando para el descanso, Luisete marró un mano a mano con el portero de los que normalmente no suele fallar. Había que afrontar el segundo tiempo con la misma intensidad para no tropezar.

La segunda parte seguiría la misma dinámica: dominio azul. Pero de nuevo indefinición arriba nos iba a hacer sufrir un poco. Alberto agarró un chutazo desde lejos y tras desviarlo como buenamente su guardameta, quedó franco para que nuestro extremo zurdo la empujase...pero un resbalón inoportuno nos privó de la tranquilidad definitiva. Poco a poco nos iba costando más tener el centro del campo. Pese a que Sergio intentaba multiplicarse, se echaba de menos a un Ale en el banquillo aquejado de mareos.

La otra mala noticia era que la banda derecha estaba olvidada. Nadie era capaz de dar un cambio de juego y utilizar la frescura de Samuel o la velocidad de Gabriel. Los minutos iban cayendo a cuentagotas. La incertidumbre también pudo acabarse si el colegiado hubiese señalado otra pena máxima cuando Luis fue arrollado por un defensa cuando se disponía a lanzar a puerta. Más de uno de los niños del equipo contrario más que jugar al fútbol, impedían que los nuestros lo hiciesen, y si te encuentras con un arbitraje así, poco o nada puedes hacer sino adaptarte, y eso es algo que deberían aprender los chavales.

Salvo en una falta cerca del área cometida por Manuel, nuestra guarida nunca se vio intimidada. El tiempo de alargue fue tan excesivo (ocho minutos) que podría servir para que cualquier cosa sucediese. Y llegó lo que antes se resistió. Dos goles de David Catalín casi fotocopiados en los que remachó en el segundo palo una victoria que siempre tuvo dueño aunque se resistiese a otorgarle propiedad. 

Ahora llegan las curvas. El sábado visitamos el feudo del Inca, para mi gusto el equipo más completo al que nos hemos enfrentado. Si nuestros figuras están a su nivel, estoy convencido que ganaremos. Pero pase lo que pase, para nosotros ya sois de por sí unos campeones. ¡Animo chicos!