Resultado: Mostoleño- 2 ; Móstoles Sur - 6
Seamos claros, sin rodeos, lo mejor del partido del viernes fue el sumar otros tres puntitos. Con todos los respetos, el rival era flojito y a los nuestros les bastó con hacer una primera parte decente para golear y punto. Luego, a echarse a dormir para guardar fuerzas; prefiero tomarlo desde esa perspectiva, porque de lo contrario seríá motivo de preocupación. Tras el partido alguien comentó que es inevitable que se contagien en encuentros así, y al verlo fácil, no den todo lo que tienen. Puede ser una lectura acertada.
Con una alineación que ya empieza a ser tipo, Diego en portería, Alberto y David en los laterales, Alejandro por delante de ellos, Gabriel y Jose en las bandas, y Luis de delantero, dió comienzo un choque sin apenas historia. En un par de flashes, la ratonería de Luisete salió a relucir. 2-0. Jugando a medio gas, la goleada se intuía. Así fue. Poco a poco fueron cayendo hasta la media docena... un gran gol de Alejandro de falta, otros dos más de Santi y hasta Adri se apuntó a la fiesta para luchar por el momentáneo pichichi.
Se pudo aumentar la cuenta goleadora, ocasiones hubo para dar y tomar, pero las sonrisas pararon ahí. Lo que nadie intuía es que ya no volveríamos a ver ningún tanto más a nuestro favor. Desgraciadamente no se produciría ninguna imagen como la de arriba o la de abajo. El segundo acto comenzó con una inyeccion de cloroformo, y no hubo manera de levantarlo.
Como me gusta más el enfangarme que a un tonto un lápiz, entre el señor de gris que enturbia la fotografía de arriba, y los contínuos cambios de posición en el timón del equipo, hubo tema de conversación en la valla. El señor del pito (no se merece que le llame del silbato) dio un auténtico recital de charlotadas. Entre ayudar a colocar la barrera del Mostoleño como si fuesen chupetines, señalar siempre faltas absurdas en nuestra contra, y poco menos que regalarles un penalty, nos tuvo entretenidos. Luis, el padre de Dani, comentaba que de no tener el partido absolutamente de cara, le hubiésemos puesto fino. Está bien ser deportivos, pero a nosotros este tipo de cosas no nos ha sucedido nunca, cuando nos han pasado por encima, nadie ha movido una pestaña para evitar una goleada.
Mientras encajábamos el segundo, el nombre del medio-centro del equipo se cambiaba cada dos por tres. Una posición clave no debería someterse a tantos vaivenes... los chavales ya no saben ni donde están a veces, y ni mucho menos, se sienten cómodos progresando en una posición fija. Volviendo al encuentro, el portero que salió tras el descanso estuvo muy firme, y evitó que consiguíesemos algún golito más. Siendo justos, también David, que se marcó un partidazo, consiguió que los nervios no aflorasen dentro y fuera. Se jugó regular tirando a mal, pero el lado bueno de la moneda son dos victorias en sendas jornadas. El próximo, el Ciudad de Móstoles.
Estoy de acuerdo contigo respecto al colegiado. En la segunda parte quiso ser benévolo con el Mostoleño y claro el arbitro lo primero que tiene que ser es imparcial ..y si es que le callo simpático los chavales del Mostoleño que los invite a fanta.
ResponderEliminarPartido de tramite y para repartir minutos que le viene bien al equipo y a los artistas que menos han jugado. Otra cosa es la rotación de posiciones , el míster dice que no afecta a los chicos, pero vi desorientados a Gabriel y Alejando los minutos que cambiaron de posición, para uno parecía que la banda era grande y al otro que el centro era pequeño.
Lo positivo es que 3 puntitos mas...hay que puntuar para cuando lleguen los Juventud y Hestoriles.
Bueno un saludo.
Firmado: el padre de Ale.